Los días torcidos

En Bilbao la línea de metro tiene forma de 'Y' (no entiendo a la gente que escribe "Y griega", como si no fueran capaces de comprender que todas las 'Y's son griegas y todas las íes son las latinas, pero bueno, sigo, que me disperso). En Bilbao, decía, la línea de metro tiene forma de 'Y', lo que quiere decir que si viajas hacia la pata de la 'Y' te sirven todos los convoyes, pero si lo haces en dirección contraria, hacia los cuernos, sólo la mitad te llevará a tu destino. Los destinos, a su vez, son alternos -una vez hacia un cuerno, otra hacia el otro- y, a ciertas horas, pasan aproximadamente cada cinco minutos. Por eso, si vas con prisa y te toca esperar nueve minutos -casi el máximo estadístico posible- puedes dar por seguro que ya has gastado toda la suerte de la semana, que hoy es sólo jueves, que al final todo se equilibra, ya me parecía a mí, lo siento, es que llego tarde, lo sé, ya he dicho que lo siento, pero no tengo carné de conducir, pereza, supongo, en verdad no lo necesito, ya es mala suerte perder diez minutos en un andén subterráneo con la cama sin hacer, haber salido a toda prisa, total para qué...