Me estoy volviendo más primario

Me estoy volviendo más primario. Lo noto. Es difícil de explicar, pero mi intelectualidad -algo impostada, como debe ser según los mandatos de Oscar Wilde-, se resquebraja. Cada vez disfruto más con las cosas simples y, sobre todo, con las cosas hechas con las manos. Con mis manos, quiero decir. Cada vez leo menos, pero cada vez hago más maquetas, dibujo más, conduzco la moto. Del mismo modo, cada vez escribo menos. De alguna manera, es como si estuviera en otra fase de un motor de explosión: ya he admitido mucho. Ahora es tiempo de expulsar. Esta fase no tiene ningún ánimo evangelizador; lo hago por mí, porque disfruto más así, y porque cada vez disfruto más de las cosas con las que disfruto. Bello galimatías, pardiez.