Imagen navideña de cena de empresa sin cena ni empresa
No, no me ha visto en este bar oscuro de entre semana, pero la cantante aficionada de jazz se contonena mientras se mira en un espejo insvisible antes de que cantemos a dúo estribillos de standards de Cole Porter.
Y quién no se ha enamorado alguna vez de la voz solista y de la guitarra. Quién no ha sentido que cantanban para él. Quién no se ha despertado después, acabado el segundo bis, con el sabor amargo del gintonic en el paladar y la pregunta de si volver a casa o quedarse hasta que del escenario desaparezca su sombra y su perfume.
2 comentarios:
Y que pensaba que era la 'unica' a la que llevabas a ese antro de perdición...
Y quién no se ha enamorado alguna vez de la voz solista y de la guitarra. Quién no ha sentido que cantanban para él. Quién no se ha despertado después, acabado el segundo bis, con el sabor amargo del gintonic en el paladar y la pregunta de si volver a casa o quedarse hasta que del escenario desaparezca su sombra y su perfume.
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