Godard siempre ha sido un director muy publicitario. Al fin y al cabo el chico Martini es una reinvención de Belmondo en A bout de soufflé (qué gran película, no me cansaría de verla).
Al final de la escapada es una película hipnótica. Creo recordar que la vi en el cine Los Ángeles cuando era aún una sala que de vez en cuando organizaba ciclos de cine clásico. Jean Seberg se merecería un post aparte. Y Belmondo, también.
Uff, ya te digo. Por cierto, que en Los Ángeles todavía programan ciclos de cine clásico. Hace poco pusieron Jules et Jim. Me gusta esa sala y donde está y su nombre... Tiene un encanto muy especial.
9 comentarios:
Mala televisión, si. Pero lo que dariais unos cuántos por encontrar una rubia asi...
No creas. Yo de las rubias me estoy quitando, que no me han dado buen resultado.
Lógico, es que donde esté una buena morenza....
¿Buena? ¿Para qué buena si las buenas van al cielo y las malas a todas partes?
Tienes razón, las chicas malas van a donde quieren.
Lo que pasa es que hay por ahi algunas buenas que dan el pego...
Estoy con vosotros: las morenas vamos a todas partes!. Es algo indiscutible.
Godard siempre ha sido un director muy publicitario. Al fin y al cabo el chico Martini es una reinvención de Belmondo en A bout de soufflé (qué gran película, no me cansaría de verla).
Al final de la escapada es una película hipnótica. Creo recordar que la vi en el cine Los Ángeles cuando era aún una sala que de vez en cuando organizaba ciclos de cine clásico. Jean Seberg se merecería un post aparte. Y Belmondo, también.
Uff, ya te digo. Por cierto, que en Los Ángeles todavía programan ciclos de cine clásico. Hace poco pusieron Jules et Jim. Me gusta esa sala y donde está y su nombre... Tiene un encanto muy especial.
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