Hace tiempo que no me compro discos. Mucho tiempo, demasiado quizás, y lo he recordado porque me ha llamado D. para decirme que entrevistaba a 'La Buena Vida' y que el próximo disco es muy bueno, como en los buenos tiempos -todavía tengo la camiseta del concierto de Bilbao-. El caso es que me mientras me lo contaba -había llamado al móvil y estaba en el trabajo- intentaba teclear con una sola mano y trataba de recordar cúal era el último disco que me había comprado. No lo he conseguido. Sigo escuchando música -preparar el carné de conducir hace que el iTunes trabaje a destajo-, tengo lo último de los grupos que me interesan. Joder, hasta escucho emisoras inglesas por internet... Pero no ya no me compro discos. Y no es, como suelo decir, porque ocupan más espacio en las baldas que en el disco duro. Supongo que todo empezó cuando se me estropeó la antena de FM de mi antigua cadena musical. Ahí dejé de sintonizar Radio3, empecé a escuchar informativos por la mañana y el mundo se volvió más feo, más real, menos pop.
martes, 28 de marzo de 2006
High Fidelity
Hace tiempo que no me compro discos. Mucho tiempo, demasiado quizás, y lo he recordado porque me ha llamado D. para decirme que entrevistaba a 'La Buena Vida' y que el próximo disco es muy bueno, como en los buenos tiempos -todavía tengo la camiseta del concierto de Bilbao-. El caso es que me mientras me lo contaba -había llamado al móvil y estaba en el trabajo- intentaba teclear con una sola mano y trataba de recordar cúal era el último disco que me había comprado. No lo he conseguido. Sigo escuchando música -preparar el carné de conducir hace que el iTunes trabaje a destajo-, tengo lo último de los grupos que me interesan. Joder, hasta escucho emisoras inglesas por internet... Pero no ya no me compro discos. Y no es, como suelo decir, porque ocupan más espacio en las baldas que en el disco duro. Supongo que todo empezó cuando se me estropeó la antena de FM de mi antigua cadena musical. Ahí dejé de sintonizar Radio3, empecé a escuchar informativos por la mañana y el mundo se volvió más feo, más real, menos pop.
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2 comentarios:
Pos sí, a mi me pasó algo parecido:
Se me rompió la radio del coche.
Ahora me desayuno con las noticias de la tele y no es,lo mismo, no señor :-)
Ya no me levanto con tiempo. Ya no me ducho con la radio puesta. Ni desayuno sentada en la mesa. Por la noche, el run run del metro me adormece cuando vuelvo a casa. Al abrir la puerta ya tienen la tele encendida. Y el ordenador me espera en el escritorio para que, de una vez, conteste a los mails de mis amigos.
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